un magnífico día de sol

el día que naciste
sobre esta corteza soleada
yo ya estaba aquí,
ya estaba aquí
y trastabillaba, sabes
como hacen
los niños afortunados
en los parques por la mañana
con las manitas sucias de tierra,
las rodillas rascadas, las carreras
bajo los ojos preocupados de los abuelos
y sabes
quizás esa distracción
mientras lanzaba piedrecitas en el lago
no era un sonido
sino el eco lejano del dolor
de tu madre
que te traía al mundo
y yo no sabía
que eras tú
que venías al mundo
era sólo un niño
distraido por los sonidos
de un tubo de escape que estallaba en la calle
de una ventana abierta por un ama de casa
de un batir de alas
de los árboles cercanos.

nadie que me explicase
que finalmente te fueses dignada
a encontrarme
sobre esta corteza soleada,
nadie que me avisase
que a partir de ahí, sabes
comenzaba a ser trazada
la recta incidente
de nuestras dos vidas en colisión
y no sé por qué nadie dijo nada
no sé por qué la tierra no se partió en un terremoto
no sé por qué no se paró
por un instante
mi pequeño corazón de niño
pero lo que sé
y de ello estoy seguro
es que ese día
fue
un magnífico día de sol.

firma Ale

(traducción de David Bosch Castillo)
in italiano